Metaplasia
intestinal gástrica
Es una enfermedad crónica del estómago caracterizada por una transformación de la mucosa normal hacia un epitelio parecido al del intestino delgado, debido a un proceso inflamatorio agravado y persistente (gastritis crónica, atrófica, etc.).
La metaplasia es un factor de riesgo para el desarrollo del cáncer
gástrico,
se considera una enfermedad pre-neoplasica de ahí la importancia de
su tratamiento y control endoscópico periódico.
La metaplasia intestinal gástrica es un hallazgo histológico
frecuente en pacientes adultos, generalmente relacionado con infección por
Helicobacter Pylori, una bacteria que se desarrolla en el interior del estómago
y que produce alteraciones en la mucosa gástrica.
Las glándulas gástricas pueden sufrir cambios morfológicos
importantes en la gastritis crónica. La llamada metaplasia intestinal denota o
implica la transformación de las glándulas gástricas en otras con aspecto
genético de intestino delgado con glándulas de la mucosa del intestino delgado.
Los cambios metaplásicos pueden variar en su distribución desde zonas
parcheadas a una afectación extensa del estómago.
Lo más destacado de estos cambios descritos es que la llamada metaplasia intestinal es un importante factor de riesgo para desarrollar graves problemas de estómago (cáncer gástrico). La gastritis atrófica multifocal y la atrofia gástrica con su metaplasia subsiguiente se han observado en pacientes con gastritis crónica inducida por Helicobacter pylorii.
Con el tratamiento erradicador del Helicobacter la metaplasia podría revertir, al menos en parte, los pacientes con metaplasia deben revisarse endoscópicamente, generalmente con carácter anual. Estas revisiones permitirían tratar a tiempo las hipotéticas posibles complicaciones de la metaplasia como el cáncer gástrico.
Lo más destacado de estos cambios descritos es que la llamada metaplasia intestinal es un importante factor de riesgo para desarrollar graves problemas de estómago (cáncer gástrico). La gastritis atrófica multifocal y la atrofia gástrica con su metaplasia subsiguiente se han observado en pacientes con gastritis crónica inducida por Helicobacter pylorii.
Con el tratamiento erradicador del Helicobacter la metaplasia podría revertir, al menos en parte, los pacientes con metaplasia deben revisarse endoscópicamente, generalmente con carácter anual. Estas revisiones permitirían tratar a tiempo las hipotéticas posibles complicaciones de la metaplasia como el cáncer gástrico.